“Todo debe decantar en el estanque del alma, allí queda todo lo bueno y lo malo, solo el tamiz del tiempo rompe las cáscaras, liberando la rigidez, y transformando en libertad, todo lo allí guardado, solo debe estar allí, lo verdadero y esencial, guardado para siempre…..”
Como un grano de arena,
La vida se escabulle.
Transformando la mente,
Liberando procesos.
Desatando tientos,
Que ataron miles de recuerdos.
Aun en la distancia sublime de los cambios,
Las paginas de un libro, muestran lo aprendido.
Lo que dejamos herrumbrados entre olvidos y recuerdos,
En algún cajón de nuestro corazón allí en el alma.
La lejanía toma, su lugar sigiloso,
Para escabullirse en un camino sinuoso de matices de cambios.
Todo, esta allí en lo más insignificante que pareciera,
Tan solo la expresión del alma.
Nos cerca más al fin de una etapa.
Caminando entre piedras,
Tratamos de aprender a sobrevivir,
Sin que nada tome de nuestro camino,
Nada de lo que no le pertenece.
Solo la experiencia resuena en quien se abre a escuchar,
Nada más.
Aunque muchas veces, queramos aceptar y comprender las actitudes,
Del ser humano.
Siempre volvemos a aceptar, lo aprendido
Y bendecir el recuerdo que quedo allí guardado.
Anochece el alma, el ocaso tomo su recuerdo,
Para aprender de el a no lastimar, a no someter.
Nadie puede tomar nada que no le pertenece,
Aun el aire, es esencial para la vida,
Pero no es nuestro es parte de la fuente,
Donde mora la verdad divina.
Y el aliento vital colma tu cáliz,
Para saberte en el camino de vida.
Escrito por: Mario Sánchez
Como un grano de arena,
La vida se escabulle.
Transformando la mente,
Liberando procesos.
Desatando tientos,
Que ataron miles de recuerdos.
Aun en la distancia sublime de los cambios,
Las paginas de un libro, muestran lo aprendido.
Lo que dejamos herrumbrados entre olvidos y recuerdos,
En algún cajón de nuestro corazón allí en el alma.
La lejanía toma, su lugar sigiloso,
Para escabullirse en un camino sinuoso de matices de cambios.
Todo, esta allí en lo más insignificante que pareciera,
Tan solo la expresión del alma.
Nos cerca más al fin de una etapa.
Caminando entre piedras,
Tratamos de aprender a sobrevivir,
Sin que nada tome de nuestro camino,
Nada de lo que no le pertenece.
Solo la experiencia resuena en quien se abre a escuchar,
Nada más.
Aunque muchas veces, queramos aceptar y comprender las actitudes,
Del ser humano.
Siempre volvemos a aceptar, lo aprendido
Y bendecir el recuerdo que quedo allí guardado.
Anochece el alma, el ocaso tomo su recuerdo,
Para aprender de el a no lastimar, a no someter.
Nadie puede tomar nada que no le pertenece,
Aun el aire, es esencial para la vida,
Pero no es nuestro es parte de la fuente,
Donde mora la verdad divina.
Y el aliento vital colma tu cáliz,
Para saberte en el camino de vida.
Escrito por: Mario Sánchez
